ULTIMA ANTENA DEL CONO SUR DEL 2021—19 DE DICIEMBRE

 ULTIMA ANTENA DEL CONO SUR DEL 2021—19 DE DICIEMBRE-

 GROSSMAN PARRA PINTO

    ENOHA, JUAN PABLO..Mis queridos nietos: El año pasado rompí la tradición de esta Antena de fin de año, por escribir una especial ante la pandemia,  pero pese a sus edades, se que lo entendieron y por eso Aquí estamos y aquí seguimos.

   QUIERO QUE SEPAN que para escribir estas notas, más que mis manos y mi teclado, uso el corazón, leo, rebusco en Internet, los visualizo en mi mente y plasmó cada palabra inmenso en la felicidad y el agradecimiento a Dios, quien por medio de mis hijas Marlin y Linmar, los puso en mi camino y en el camino de su abuelita Reinelda,

   JUAN PABLO, ENOHA, quiero que siempre recuerden que cuando Dios pensó en crear algo lindo para los niños del mundo, creo a los ABUELITOS.

  A VECES, Y LO CONFIESO, soy egoísta y me gustaría que jamás crecieran y se mantuvieran así, niños. Sin conocer la maldad, la envidia, los tropiezos de la vida, las intrigas y tantas cosas negativas que nos rodean, es decir que me gustaría que en sus corazones solo haya bondad y felicidad.

    ENOHA, JUAN PABLO, ustedes crecerán y yo por mi parte seguiré envejeciendo, y ustedes me veran IGUALITO, pero por supuesto llegará el momento en que tengamos que separarnos y cada uno tenga vida propia, como es la ley de la vida, pero al llegar ese día en que yo no pueda ir hasta ustedes, no se olviden de venir a mí. Si un día ya no recuerdo sus nombres, vengan y recuérdenme quienes son ustedes. Si un día ya no puedo expresar mi orgullo y mi amor por ustedes, recuerden que en mi alma nada de eso se ha perdido. Son y seguirán siendo una de las partes más importantes de mi vida.

   MIS QUERIDOS NIETOS, ustedes son todavía muy pequeños, con apenas ocho años cada uno, y quieren tenerlo todo y nosotros, tus padres y abuelos, hacemos cuanto esté de nuestra parte para complacerlos, pero quiero que recuerden que se compra lo que tiene precio, pero se conquista lo que tiene valor.

    ENOHA, JUAN PABLO, cada año, por esta época, ustedes, gracias a la vida pragmática que vivimos y la influencia de la televisión y las redes sociales,  piden lo que les invitan a tener en esos medios tecnológicos o lo que le vieron a otro niño o quizás lo ofrecido en una lujosa tienda. Mis nietos queridos, quizás ahora no entiendan que hay cosas inalcanzables para algunos y por ello les quiero mostrar la ternura de Héctor. Les pido Enoha y Juan Pablo, que sigan leyendo.

    HECTOR, es un niño brasileño, que esta semana conmovió al mundo en los cuatro costados al escribirle al Niño Jesús una carta, una corta pero  hermosa carta, donde le dice: “Querido Niño Jesús, mi sueño en esta Navidad es conseguir algo de carne para comerla con mis padres en Nochebuena”. Queridos, nietos, es difícil no soltar una lágrima al leer esa carta de Héctor, y le pido a Dios que ustedes al leer esa historia puedan comprender el alcance, la profundidad y la nobleza que hay en el corazón de Héctor. Y sepan que en el mundo “hay muchos Héctor”.

   JUAN PABLO, ENOHA, se que al crecer tendrán tropiezos, la nobleza y la inocencia de sus corazones de niños van a recibir negros nubarrones y ya no tendrán esa ternura infantil, pero si algún día se llegan a creer más que otros, entiendan que si la subida les hace olvidar la humildad, la caída se encargará de recordártela. 

TENDRAN TROPIEZOS. Sepan que la vida a veces duele, a veces cansa, a veces hiere. La vida no es perfecta, no es coherente, no es eterna, pero a pesar de todo, mis queridos nietos, La vida es Bella.

    QUERIDOS NIETOS, como quisiera que siempre estuvieran con nosotros o nosotros, tus padres y abuelos,  estuviéramos con ustedes, pero la ley de la vida no lo permite, pero deben saber que hay gente noble y hay gente negativa que les rodearan, y por eso deben tener presente que cuando muchos les abandonen, cuando crean que están solos ,  miren a su lado y verán que siempre tendrán un amigo sincero, pero sobre todo, miren al Cielo y verán que Dios siempre va a estar con ustedes, y  es allí cuando deben decir como EL PRINCIPITO que “mi corazón pertenece a ese amigo que se quedó conmigo durante mis crisis y nunca me abandonó”.

   ENOHA, JUAN PABLO, es posible que ahora cuando son niños algunas veces sientan temor a algo, pero eso se disipa porque ustedes saben que estamos a su lado. Sé que tendrán miedo al enfrentar la vida, pero tengan presente la frase pronunciada hace más de dos mil años por El Carpintero de Galilea en su paso por la  vida terrenal: “Dejad que los niños  vengan a mí, porque de ellos es el reino de los cielos” y no olviden jamás recurrir a Isaías 41 -10: donde Dios nos dice “No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te fortalezco; siempre te ayudaré; siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.. 11- He aquí que todos los que se enojan contra ti serán avergonzados y humillados; los que contienden contigo serán como nada y perecerán”.

    MIS QUERIDOS NIETOS, han pasado casi 365 días de este año, y Dios no nos ha fallado. Ha sido la decisión de El  que mucha gente que amamos haya dejado la vida terrenal. A ustedes, pese a ser niños, les he visto llorar con esa nobleza infantil, cuando la muerte nos ha arrebato a un ser querido, pero así es la vida, y estoy conforme porque sé que poco a poco han ido aprendiendo esa lección.

    ENOHA, JUAN PABLO, cuantas cosas más quisiera decirles, pero sé que no importa cuánto les diga, pues serán insuficientes esas palabras y en esta Navidad vale más un abrazo que con seguridad nos daremos al celebrar el Nacimiento de Jesús,  y no olviden que no existe ni existirá nadie que los amé más que Dios,

                       MIS QUERIDOS NIETOS, jamás me cansaré de darle gracias al Todopoderoso por darme la dicha de tenerlos a ustedes. Los quiero demasiado y esperemos con alegría, la llegada de la Nochebuena, Tu abuelito Grossman.

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